miércoles, 22 de abril de 2009

Pedro Páramo

Hola a todos:
Tras la lectura de la extraordinaria obra de Juan Rulfo, les invito a dar a conocer sus reflexiones en torno a los temas propuestos en clases.
Pueden escoger una de las siguientes preguntas:

(a) "El recurso a la multiplicidad de puntos de vista narrativos predomina en la novela desde el primer cuarto del siglo XX, en oposición a la novela anterior, donde predominaba un único punto de vista narrativo." Explique qué tipos de acercamientos desde el punto de vista narrativo reflejan las novelas que Ud. leyó y justifique su respuesta con ejemplos concretos.
O
(b) "Las novelas de aprendizaje o de iniciación suelen abarcar una cronología del protagonista que comienza en la infancia y culmina en lo que se considera su madurez psicológica." Discuta la validez de esta afirmación comentando en qué sentido se reflejan anécdotas de la infancia, la adolescencia o la juventud de los protagonistas y su importancia en relación al desarrollo de la trama de las novelas. Justifique su respuesta con ejemplos concretos.

Recuerden la pauta de evaluación:

Conocimiento y comprensión de la obra 5
Respuesta a la pregunta 5
Apreciación de los rasgos literarios 5
Presentación 5
Uso del lenguaje 5

¡Buena suerte!

20 comentarios:

  1. Las novelas del siglo XX supusieron un cambio en el paradigma de la literatura, pues en su creación se incorporaron técnicas completamente innovadoras. Estos nuevos aspectos nacen para poder cumplir el objetivo que se propuso la literatura contemporánea: hacerla menos ajena al lector, permitiéndole a este formar parte del relato y describiendo los hechos de una manera mucho menos absoluta. Dentro de las técnicas usadas para lograr este cometido, se pueden nombrar la corriente de conciencia, el soliloquio y la supresión del narrador omnisciente clásico. Refiriéndose a esta última característica, el narrador clásico del siglo XIX, caracterizado por entregar un visión totalizadora de los hechos, lo que no daba mucho espacio a interpretación; fue reemplazado por múltiples narradores que cuentan un mismo hecho desden su propia perspectiva, que puede o no estar afectada por los recuerdos o sentimientos de los personajes. Esto permite recrear la manera sesgada en que, en la vida real, las personas reciben información. Esto no significa que el narrador omnisciente haya desaparecido por completo, pero su presencia en la novela contemporánea no es gravitante y su forma de narrar se aleja bastante a la de su antecesor. Para mostrar la presencia de estas características, se analizarán las obras Pedro Páramo del mexicano Juan Rulfo, y La Amortajada de la chilena María Luisa Bombal.

    En la novela mexicana, desde el principio se muestra un narrador en primera persona del tipo protagonista, por lo que presenta focalización interna al contar desde dentro del relato. Este narrador resulta ser Juan Preciado, quien llega a Comala para buscar a su padre, Pedro Páramo: "Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo, y yo le prometí que yo vendría a verlo en cuanto ella muriera." A lo largo del relato, discursos de este tipo son recurrentes, en los cuales señala y describe sus acciones. Además, en él describe la situación desolada en que se encuentra Comala y sus pocos habitantes: "Miré las casas vacías, las puertas desportilladas, invadidas de yerba (...) Al cruzar la bocacalle vi una señora envuelta en su rebozo que desapareció como si no existiera." Sin embargo, la función de Juan Preciado como narrador abarca mucho más que lo dicho anteriormente: él actúa como canalizador de las distintas historias que conforman el relato, pues es él el que reproduce los diálogos que tuvo con los distintos habitantes del pueblo y da a conocer lo que tenían que decir. A continuación se presenta un diálogo de Juan Preciado con Eduviges Dyada, su "anfitriona":

    "- ¿Quién?¿Mi madre?
    - Sí. Ella.
    Yo no supe que pensar. Ni ella me dejó en qué pensar.
    - Este es su cuarto - me dijo.
    No tenía puertas, solamente aquella por donde habíamos entrado. Encendió la vela y lo vi vacío."

    Otro ejemplo de esta canalización es lo qu ocurre con Dolores Preciado, madre de Juan, cuya voz se conoce por medio de los recuerdos que tiene el protagonista en determinados momentos. La función de estos recuerdos es mayormente descriptiva, pues se entregan características de Comala en su época pasada, cuando era un lugar hermoso. Estas descripciones permiten comparar Comala antes y después de la vida de Dolores: "Traigo los ojos con que ella miró estas cosas, porque me dio sus ojos para ver: "Hay allí, pasando el Pueblo de Los Colimotes, la vista muy hermosa de una llanura verde, algo amarilla por el maíz maduro..."".

    En el caso de La Amortajada, también hay presencia de narrador protagonista, que es Ana María, una mujer que está siendo velada. Su importancia y presencia dentro de la obra es mucho mayor que la de Juan Preciado en Pedro Páramo, pues las historias presentes y pasadas de todos los personajes, salvo unos cuantos detalles, se conocen por los recuerdos y sensaciones de la protagonista cuando está dentro del ataúd. Su discurso también es muy distinto comparándolo con el del hijo de Pedro Páramo: para empezar, se nota que quien habla es una mujer, pues al narrarse las acciones de Ana María siempre hay una justificación por detrás. Además, se describen mucho los sentimientos frente a muchos hechos que podrían ser considerados cotidianos, especialmente haciendo alusión a la naturaleza. Juan Preciado no hace mucho hincapié en sus sentimientos y los describe tan bien como Ana María.

    Otro tipo de narrador presente en Pedro Páramo es el de tipo omnisciente, que aparece en su forma más pura muy pocas veces en el texto, que es cuando introduce las historias de los personajes y hace referencia al ambiente: “Era la medianoche y allá afuera el ruido del agua apagaba todos los sonidos. Susana San Juan se levantó despacio. Enderezó el cuerpo lentamente y se alejó de la cama.” Digo en su forma pura, porque el resto de las veces su presencia presenta una particularidad: aparece prestando su voz a distintos personajes para que narren sus historias. Por medio de esta técnica, se conocen los detalles de las vidas del mismo Pedro Páramo, el Padre Rentería y Dorotea, entre otros. En algunos casos, los parlamentos son tan detallados y ricos en detalles íntimos, que se confunden con narradores personajes. Esto porque, aparte de lo dicho anteriormente, se narra en primera persona. Un ejemplo de la esta situación es cuando habla Susana San Juan: “Estoy acostada en la misma cama donde murió mi madre hace ya muchos años; sobre el mismo colchón; bajo la misma cobija de lana negra sobre la cual nos envolvíamos las dos para dormir (…) Estoy aquí, boca arriba, pensando en aquel tiempo para olvidar mi soledad.”

    En la novela chilena, la presencia del narrador omnisciente también es escasa en comparación a la del narrador protagonista. Su función radica en introducir el presente, es decir, comienza a narrar cuando termina un recuerdo de Ana María y se vuelve al presente para observar a otro personaje. En varias ocasiones, el discurso de ambos narradores se intercalan indistintamente, lo que causa confusión, pues no se sabe muy bien quién está narrando. También en la Amortajada hay presencia de narrador personaje. Por ej. Fernando, amigo de Ana María, que narra estando al lado del ataúd explicando los sentimientos que le causaba la muerte de la mujer.

    En Conclusión, se puede decir que efectivamente la multiplicidad de narradores es una característica presente y fundamental en las novelas de la contemporaneidad, que permite no sólo darle una perspectiva más realista a los hechos relatados. Sin embargo, no sólo hace eso, sin que también dificulta la lectura en reiteradas ocasiones. Esto se traduce en una mayor participación del lector en el relato, que cumple a cabalidad con el objetivo de toda creación contemporánea: hacer que el lector se integre y sienta que la literatura ya no le es más ajena.

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  2. La literatura Contemporánea, correspondiente al siglo XX-XXI, está provista de múltiples características. Los escritores de la época comienzan a incluir nuevas perspectivas en el relato, es decir, se adentran al mundo de la superrealidad, en donde ésta no es una en su totalidad, sino que la combinación de varios puntos de vista. Se incorporan técnicas narrativas nuevas, movimientos ligados a lo vanguardista, códigos oníricos, míticos, inconscientes, las perspectivas múltiples, entre otros; todo esto en forma de revelación a la realidad única presentada en los siglos anteriores.
    La sociedad se encuentra inmersa en una sensación de soledad, pérdida de identidad, y específicamente, es en Latinoamérica en donde surge el boom literario, mediante el cual los autores hacen una reflexión sobre la identidad propia del lugar a través de diversas obras. Se encuentran autores como María Luisa Bombal y Juan Rulfo, quienes mediante sus obras “La Amortajada” y “Pedro Páramo”, respectivamente, intentan reflejar la situación social, la realidad en la que se encuentran inmersos. Para ello, ambos escritores recurren a uno de los recursos ya mencionado y más destacado de la época: la multiplicidad de las voces; cada una otorgando el testimonio de su propia realidad, de su única perspectiva.
    Para proceder a analizar el acercamiento desde el punto de vista narrativo en la Contemporaneidad, iniciaré con el caso de la novela mexicana “Pedro Páramo”.
    La insólita estructura de la obra de Rulfo presenta una yuxtaposición de elementos narrativos, e incluso antitéticos respecto al relato del siglo XIX, que a veces generan incomprensión en la lectura. Hay presencia, principalmente, de dos narradores con múltiples puntos de vista: uno catalogado universalmente como omnisciente, y un narrador protagonista, que corresponde al personaje Juan Preciado; me refiero a “principalmente”, ya que ciertos fragmentos de la novela son narrados por personajes secundarios.
    En teoría, y en forma de simplificar la multiplicidad de voces, se puede decir que es el narrador omnisciente quien va a prestar su voz a los diversos personajes, para que éstos, de forma equitativa, manifiesten sus puntos de vista y el lector obtenga una visión clara del relato (que según la época, es sólo posible mediante la entrega de una imagen completa de la existencia, razón por la cual se utilizan múltiples narradores).
    Nos podemos percatar de la presencia de un narrador omnisciente en contadas ocasiones y generalmente, acompañado de un monólogo interior, dado que mayormente se encuentra con el propósito de introducir al resto de los narradores, o bien para marcar el fin de sus discursos: “Se estuvo oyendo el agua borbotar durante un largo rato; luego se ha de haber dormido, porque cuando despertó sólo se oía la lluvia callada. Los vidrios de la ventana estaban opacos, y del otro lado las gotas resbalaban en hilos gruesos como de lágrimas. ‘Miraba caer las gotas iluminadas por relámpagos y cada que respiraba, suspiraba, y cada vez que pensaba, pensaba en ti Susana´. Es por ello, que podemos mencionar que el narrador omnisciente se desdobla para poder encontrar los narradores personajes.
    La obra nos presenta esta característica mediante personajes reconocibles como lo serían Juan Preciado, Pedro Páramo, y el narrador omnisciente. Procediendo a caracterizar el primero, se puede decir que es él quien inicia el relato, narrando los hechos como protagonista, en primera persona. Es él quien se va a referir a la causa de su viaje a Comala al decir: “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera”; otorgando a la vez, un motivo razonable a la historia. El personaje, además, presenta un tipo de focalización interna, es decir, nos narra desde dentro del relato, desde su propia perspectiva. Juan Preciado cumple un rol esencial a lo largo del relato; pudiendo llegar a ser considerado como el protagonista de éste, debido a que es él quien nos va a introducir al resto de los personajes, va a reproducir sus diálogos, sus memorias pasadas, dando a entender al lector la posición de cada uno de ellos. “…Llanuras verdes. Ver subir y bajar el horizonte con el viento que mueve las espigas, el rizar de la tierra, el olor de la alfalfa y del pan. Un pueblo que huele a miel derramada…”; es éste uno de los recuerdos que tiene Juan Preciado de su madre, la descripción que ésta le hacía de su querido Comala, y la cual va a contrastar por completo con la descripción que el personaje hará según su punto de vista: “Hubiera querido decirle: Te equivocaste de domicilio. Me diste una dirección mal dada. Me mandaste al ‘¿dónde es esto y dónde es aquello?´ A un pueblo solitario buscando a alguien que no existe”.
    Ahora bien, en la novela chilena La Amortajada, encontramos múltiples similitudes con la novela descrita anteriormente. La principal voz del relato es la misma amortajada, Ana María, quien nos narra desde su lecho de muerte. Este narrador se presenta en primera persona: “Aquel brusco, aquel cobarde abandono tuyo, ¿respondió a una orden perentoria de tus padres o a alguna rebeldía de tu impetuoso carácter? No sé. Nunca lo supe. Sólo sé que la edad que siguió a ese abandono fue la más desordenada y trágica de mi vida"; y a diferencia de la novela anterior, podríamos decir que es ella quien va a desdoblar su voz a un narrador en tercera persona, es decir, al narrador omnisciente. Los límites entre uno y otro narrador son claros; aunque cabe mencionar que el punto de vista, aún cuando se presenta el narrador omnisciente, es el de la muerta: “El brusco, cobarde abandono de su amante, ¿respondió a alguna orden perentoria o bien a una rebeldía de su impetuoso carácter? Ella no lo sabe, ni quiere volver a desesperarse en descifrar el enigma que tanto la había torturado en su primera juventud”. Es su perspectiva la predominante a lo largo de la historia, ya que el narrador omnisciente no sabe más del relato que ella misma. Cabe destacar la similitud entre ambos discursos, lo que comprueba la posible interpretación hecha.
    Los narradores secundarios, por otro lado, van apareciendo a medida que el relato transcurre, y la muerta va recibiendo visitas. Éstos van a ser transitorios, aunque de gran ayuda para el entendimiento de la historia. Cada uno va a contar su historia, sus recuerdos con la protagonista, en primera persona: “Y no Ana María, siempre me creíste más fuerte de lo que era. Te admiraba. Admiraba esa tranquila inteligencia tuya cuyas raíces estaban hundidas en lo oscuro de tu ser” (discurso realizado por Fernando, un amigo cercano de la protagonista).
    A modo de conclusión, es necesario mencionar que los narradores estudiados, en ambas obras, no se esfuerzan en lo más mínimo por representar un mundo coherente para nosotros, sino más bien muestran la realidad tal y como es percibida por ellos. Esta imagen, por lo tanto, va a obligar al lector a establecer sólidos supuestos en el mundo de la novela moderna, para que ésta pueda ser comprendida y aprehendida por el mismo. Es específicamente esta característica de la novela la que llevará al lector a representar otra de las características contrastantes de la novela contemporánea: un lector activo, el cual se debe explicar las motivaciones de los personajes, e incluso a veces, el desenlace de la obra. Se encuentra obligado a participar y a ser un coescritor de ésta, para poder entenderla, percibirla y disfrutar del contenido que lleva implícito.

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  3. Toda novela que hable o muestre la evolución de un personaje a partir de su infancia, hasta su considerada madurez psicológica se puede considerar como una novela de aprendizaje o de iniciación; esto se ve en el lazarillo de Tormes, donde se relata como un joven pobre y sin educación asciende socialmente y como a través de diferentes dueños logra adquirir conocimiento sobre la vida, hasta que finalmente se establece en un trabajo fijo. En el siglo XX se logra ver un fenómeno similar con el retratamiento del cuarto estado en la literatura, esto se debe a que tanto la ascensión social de los personajes a una vida de mejor calidad, como el crecimiento personal de estas es retratada. Esto se puede observar en novelas hispanoamericanas contemporáneas como Pedro Páramo de Juan Rulfo y La amortajada de María Luisa Bombal respectivamente.

    El crecimiento de estos dos personajes es presentado a través de pequeños fragmentos que tienen como finalidad mostrar como el personaje va cambiando de acuerdo a eventos en su vida que claramente a la vez los van marcando. Se pueden observar dos modalidades por las cuales estos fragmentos pueden ser presentados, en Pedro Páramo se utiliza un método que se puede considerar como “indirecto” ya que Pedro casi no relata sobre su vida, sino que su historia es relatada a través de un narrador omnisciente que en cierto modo se adapta a cada personaje que cuentan relatos de la vida de este, creándose una pluralidad de voces que muestran más que nada como Pedro se proyecta hacia el mundo, un ejemplo de esto se puede observar en la primera reunión entre Fulgor y Pedro “-Como tú quieras. Pero que no se te olvide el “don”. ¿Quién era aquel muchacho para hablarle así?” (Rulfo: 33) Esta modalidad permite observar el crecimiento de Pedro ya que permite conocer como el trato de Pedro con las personas va cambiando con el tiempo. Por otra parte en la amortajada se utiliza un método “directo” para conocer la historia y evolución del personaje, ya que es ella en la mayoría de los casos quien relata la historia, por medio de un monólogo interior lo cual nos permite conocer cómo se siente, ya que a medida que se va relatando ella va autoanalizando sus acciones y comprendiendo o explicando que cosas fueron las que la llevaron a actuar de determinada manera.

    En otro ámbito, cada evento que se presenta en la historia tiene una función; se utilizan tanto para mostrar la evolución del personaje, como para afectar en la trama de la novela misma. Esto se puede ejemplificar claramente con Pedro Páramo. Para comenzar en su infancia Pedro pierde a sus figuras a seguir, primero a su abuelo, después a su padre, quien creía que era un total inútil “Yo no esperaba de él nada. “Es un inútil”, decía de él mi difunto patrón don Lucas.” (Rulfo: 35), con la muerte de este último se entiende que también perdió a su madre “-Han matado a tu padre. -¿Y a ti quién te mató, madre?” (Rulfo: 25) Esto lo deja como creador exclusivo de un modelo de valores y objetivos a seguir, nadie va a decidir por él y nadie lo va a mandar. Al mismo tiempo Pedro descubre a su primer y único amor, Susana quien por decisión de su padre es alejada de Media Luna. Estos dos eventos pueden explicar completamente la evolución de Pedro a través de toda la novela, para empezar la perdida de la figura a seguir como había mencionado lo hace en cierto modo creer que él es dueño de la verdad absoluta y que nadie ni nada tiene control sobre él “La ley de ahora en adelante la vamos a hacer nosotros.” (Rulfo: 38) además podría explicar el porqué él reconoce tan solo a uno de sus supuestos hijos, Miguel, hijo de una madre que murió en el parto, no quería que a él también le faltará un modelo a seguir, ya que ese evento fue muy traumático para Pedro en su infancia. “Vino hasta su memoria la muerte de su padre […] Nunca quiso revivir ese recuerdo porque le traía otros, como si rompiera un costal repleto y luego quisiera contener el grano.” (Rulfo: 60) Por otra parte el abandono de Susana lo lleva a caer en la poligamia, probablemente para llenar el vacío que esta dejo en su vida y esto se puede afirmar porque no existe evidencia que después de casarse con ella él haya seguido con esta tendencia de acostarse con casi toda mujer que se le pasara por el frente. Además, ella podría considerarse como la catalizadora del deseo inexplicable que Pedro tiene de querer poseer todo, sin importar a quien pase a llevar “Espere treinta años a que regresaras, Susana. Esperé a tenerlo todo. No solamente algo, sino todo lo que se pudiera conseguir de modo que no nos quedara ningún deseo, solo el tuyo, el deseo de ti” (Rulfo: 72) Todos estos eventos se combinan para enseñarnos cómo fue que Pedro logro convertirse en el hombre a temer y como logro ascender socialmente.

    Finalmente se puede decir que ambos personajes muestran cierta evolución durante su historia aunque sea en diferentes ámbitos, por una parte Pedro termina como un hombre rico pero sin ningún tipo de conexiones emocionales, ya que todo lo que alguna vez ha querido lo ha perdido, es más una de las últimas resoluciones que toma es vengarse de Comala. “Me cruzare de brazos y Comala se morirá de hambre. Y así lo hizo.” (Rulfo: 102) Él logro evolucionar y ascender socialmente, pero emocionalmente se encuentra estancado en el mismo lugar que al inicio, por lo cual esta novela no puede considerarse como una novela de aprendizaje en un cien por ciento, ya que el crecimiento del personaje no fue absoluto. Mientras que en la amortajada Ana María aunque es capaz de aprender algo de los que la rodeaban y aprender de ella misma, este conocimiento lo logra exclusivamente una vez que está muerta, por lo cual ella no puede utilizar esto para su beneficio. Es por esta razón que esta novela se considera una novela de aprendizaje subversiva, ya que rompe con el orden común esperado en las novelas de iniciación.


    Texto utilizado:
    Rulfo, J. (1953). Pedro Páramo y el llano en llamas. Barcelona, España: Planeta.

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  4. Por favor, disculpe la hora profe... se me olvidó que tenía que subirlo x.x De verdad lo siento. Gracias por su paciencia.

    Abrazos

    Fernanda.

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    Control de lectura de Pedro Páramo

    Respuesta a la Pregunta:

    Pregunta 1: “El Recurso a la multiplicidad de puntos de vista narrativos predomina en la novela desde el primer cuarto del siglo XX, en posición a la novela anterior, donde predominaba un único punto de vista narrativo.” Explique qué tipos de acercamientos, desde el punto de vista narrativo, reflejan lasnovelas que usted leyó y justifique sus respuestas con ejemplos concretos.

    Pedro Páramo es una novela de Juan Rulfo publicada por primera vez en 1955 y que pertenece a la época contemporánea. Esto se hace evidente en sus características estilistas rupturistas. Entre ellas están las anacronías que abundan en el relato, los personajes, que transgreden las características tradicionales porque, entre otras cosas, están muetros, y la multiplicidad de narradores y puntos de vistas presentes. Será esto último, los narradores y todos sus recursos, lo que analizaré a continuación.

    Este texto presenta dos narradores. El primero en aparecer es un narrador protagonista que, por lo tanto, narra en primera persona singular y posee focalización interna, y que se centra en el punto de vista de Juan Preciado. Inicia su relato con la frase “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo,” lo que resume el argumento de toda la historia relatada por este narrador.

    Aunque el enfoque principal de este narrador es el punto de vista del protagonista de su relato, tiende a cambiar de enfoque de vez en cuando a través de las conversaciones del protagonista con otros personajes que aparecen en su narración. El autor hace uso de la técnica racconto en los discursos de los personajes con los que se encuentra el protagonista, agregando así más puntos de vista a la narración de este narrador. Un ejemplo de esto es cuando Eduviges, la primera persona en recibir a Juan Preciado en Comala, le cuenta la historia de cómo ella estuvo a punto de ser su madre. El racconto es también utilizado por el protagonista en su narración, cuando algo en su alrededor gatilla recuerdos de su madre en él. De esta forma, el autor cambia de punto de vista a travvés de los recuerdos del narrador, mostrando el de la mádre de él. Estos raccontos son, usualmente, contrastes entre la imágen que ella le había entrgado de Comala en sus relatos con la imagen que la realidad le entregana del pueblo a Juan Preciado ó, simplemente, recuerdos de los relatos de la Comala de su madre. Destacan es estos fragmentos las descripciones de la Media Luna y Comala como lugares fértiles y prósperos, contrastando con el árido pueblo fantasma al que llega Juan.

    Una segunda técnica utilizada por el autor en este narrador es el flashback, de la que hace uso de varas formas. Una modalidad de flashback se presenta cuando, en los diálogos, los demás personajes hacen pequeñas referencias a su pasado o al de Comala, de modo similar al uso anterior del racconto; por ejemplo, cuando Damiana Cisneros dice “-Este pueblo está lleno de ecos... Hubo un tiempo que estuve oyendo durante muchas noches el rumor de una fiesta.”. Otro uso recurrente del flashback es también análogo al uso del racconto, y son las referencias a los recuerdos que el protagonista tiene de su madre, y que surgen en su narración del relato. El uso más repetido de este recurso son las meciones de una de las últimas frases de Dolores Preciado a su hijo: “... El abandono en que nos tuvo, mi hijo, cóbraselo caro.”

    El segundo narrador en aparecer en el relato es el narrador principal de la novela. Éste es un narradors omnisciente, por ende, posee grado de focalización cero y narra en tercerra persona. Este narrador presenta los puntos de vista de Pedro Páramo, el Padre Renterías, Fulgor Sedano, Miguel Páramo y Susana San Juan. Aparece por primera vez cuando, del relato de Juan Preciado y su narración de su llegada a casa de Eduviges, se pasa a la narración en tercera persona de la infacia o, quizá, juventud, de Pedro Páramo.

    Este narrador, para presentar los distintos puntos de vista, cambia de protagonizta en su narración, lo que se hace evidente en la estructura visual del texto, que separa los párrafos de los puntos de vista de distintos personajes con más espacio que los párrafos que pertenecen a un mismo personaje. La mayoría de las veces que cambia de punto de vista se puede reconocer el personaje central del fragmento ya que es el primero al que se hace referencia tras el corte en el texto y es el único personaje en ese fragmento del que se conocen su pensamientos e intenciones no verbalizadas.

    Otra técnica que utiliza, esta para profundizar en los distintos puntos de vista que presenta, el narrador omnisciente es el monólogo interior, donde parece entregar la narración de los hechos al personaje que en ese punto de la narración está centrado el relato. Un ejemplo es aquel monólogo del joven Pedro Páramo en la primera aparición de este narrador, donde se nos presentan sus pensamientos mientras se esconde de su familia en el baño: “Pensaba en ti, Susana. En las lomas verdes. Cuando volábamos papalotes en la época del aire.”. Estos monólogos tienen la particularidad de que incluyen otra técnica narrativa al cumplir la función de raccontos. Otro es el del Padre Renterías, cuando, en sus pensamientos se relata como Pedro Páramo recibió a Miguel como si hijo, aparentemente, el único al que reconoció.

    En tercer lugar, en este narrador, al igual que el anterior, el autor entrega la narración a otros personajes, de modo que parece un narrador interno, a través de sus diálogo, como son los relatos de Dorotea y Juan Preciado cuando están enterrados los dos en la misma tumba.

    Finalmente es este narrador el que da lugar al narrador protagonista caracterizado por Juan Preciado. Esto se hace evidente en la primera conversación entre Dorotea y Juan Preciado, donde este último no está como narrador sinó como un personaje de la narración del narrador omnisciente: “¿Quieres decirme que te mató el ahogo, Juan Preciado?... -Tienes razón Dorotea. Me mataron los murmullos”. Si se observa este diálo go con detención, y luego la primera fraase del libro “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre...” se puede concluir que toda la narración del narrador protagonista Juna Preciado es simplemente un díalogo que el tiene con Dorotea mientras le cuenta cómo es que llegó a morir en Comala.

    En conclusión, esta novela definitivamente presenta multiplicidad de puntos de vista ya que la historia se narra mostrndo partes y pedazos de la realidad vividos por distintos personajes que, cuando se juntan y se ordenan, forman el total de la historia de Pedro Páramo. Esto lo logra a través de dos narradores, uno de los cuales (el narrador protagonista) surge del otro (el narrador omnisciente) y que, nuevamente, permiten ampliar el “campo visual” del lector sobre sobrelos hechos, permitiéndo así una imagen más completa de la realidad presentada de la que se logra mirando a través de los ojos de un solo personaje. Todo esto hace de Pedro Páramo una novela, en este aspecto, definitivamente, contemporánea.

    Bibliografía:

    Juan Rulfo. Pedro Páramo. Santiago de Chile: Fondo de Cultura Económica, primera edición (1955), decimoséptima reimpresión. (1998)

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  5. Hola profe!! Perdón, me atrasé una hora y veintiún minutos. Ojalá tenga un buen domingo :) que esté bien, nos vemos!

    Francisca Riquelme (por si no se acuerda, como siempre :(, soy la colorina)

    En el año 1900 comenzó un período conocido como la época contemporánea, en el que se produce un quiebre con todos los cánones que existían anteriormente para elaborar una producción literaria. Entre los rasgos que caracterizan a esta tendencia está la multifocalización, que se refiere a la multiplicidad de puntos de vista o narradores que hay en un solo relato; en contraste con el único narrador que había anteriormente en la literatura. Esta técnica narrativa se logra a través del realismo mágico, mundo narrativo originado en Latinoamérica en el cual se presenta lo paranormal como algo cotidiano, abandonando de esta manera los criterios racionales que rigen la narración.

    Existen diversas obras que presentan la característica previamente presentada. En primer lugar está La Amortajada, obra Chilena escrita por María Luisa Bombal y publicada el año 1938. Es considerada un fuerte exponente de la literatura contemporánea ya que presenta varios de los rasgos que caracterizan a este movimiento literario. En consecuencia, en ella se pueden distinguir claramente dos narradores: uno omnisciente, y por lo tanto en tercera persona, que cuenta la historia con focalización cero; y otro protagonista, que es la difunta Ana María. Ella cuenta toda su vida desde su perspectiva, es decir con focalización interna, en contraposición al primer narrador que sólo cuenta lo que pasa durante el velorio de la amortajada, metáfora para hablar de la muerta.

    La obra que analizaremos más profundamente según la cuestión presentada es Pedro Páramo, de Juan Rulfo. Esta obra fue publicada el año 1955 en México. Es una producción literaria altamente valorada, no sólo por la época en la que se escribió, sino que también por la complejidad en la forma en que se narra. Posee una cantidad de narradores que hace casi imposible la comprensión del relato. Procederemos a analizar dichas voces narrativas.

    Secuencialmente, el primer narrador que aparece en el relato es Juan Preciado, el hijo no reconocido de Pedro Páramo que va en búsqueda de su padre. Este narrador habla en primera persona y por lo tanto tiene focalización interna, ya que es el protagonista de la historia, esto se puede evidenciar mediante la siguiente cita textual: “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera". Es en torno a este personaje que se desarrolla toda la acción, por lo tanto se le puede ver involucrado en varias enredosas situaciones con personajes que parecen estar vivos pero que no lo están, esto se puede evidenciar por la falta de comunicación o coordinación que existe entre el extranjero y los personajes “locales”:

    “-No me acuerdo.
    -¡Váyase usted mucho al carajo!
    -¿Qué dice usted?
    -Que ya estamos llegando, señor.
    -Sí, ya lo veo. ¿Qué pasó por aquí?
    -Un correcaminos, señor. Así les nombran a esos pájaros.
    -No, yo preguntaba por el pueblo, que se ve tan solo, como si estuviera abandonado. Parece que no lo habitara nadie.
    -No es que lo parezca. Así es. Aquí no vive nadie.
    -¿Y Pedro Páramo?
    -Pedro Páramo murió hace muchos años.”

    Esto es extraño ya que ambos personajes parecen estar en distintas conversaciones. Por sobre todo esto lo más extraño es que Abundio, el segundo hablante de la cita textual presentada, le dice a Juan Preciado que Pedro Páramo está muerto, a pesar de haberle dicho anteriormente que su padre “…Se pondrá contento de ver a alguien después de tantos años que nadie viene por aquí”.

    Luego, se puede observar la entrada de un narrador en tercera persona, omnisciente. En consecuencia, su focalización es cero. Este narrador cumple una función fundamental ya que, además de narrar lo que sucede en otro espacio temporal “El agua que goteaba de las tejas hacía un agujero en la arena del patio.”, da el paso o se “desdobla” para que ingresen el resto de los “narradores”1 de la historia. De esta manera se puede decir que todos los demás “narradores" ingresan al relato mediante una amplia gama de recursos literarios. Entre ellos se encuentra el estilo directo, en el cual el narrador deja que oigamos directamente de los personajes lo que ellos dicen, esto no es confundido con una narración pero de igual manera introduce a los hechos:

    “-¿Qué tanto haces en el excusado?
    -Nada, mamá.
    -Si sigues allí va a salir una culebra y te va a morder.
    -Sí, mamá.”

    Inmediatamente después encontramos al monólogo interior, discurso de un solo personaje que expresa en voz alta sus sentimientos personales o dirigiéndose a otra persona. Este es utilizado para que los personajes cuenten su interioridad, el primer caso en el que se hace presente es en la infancia de Pedro Páramo: “Pensaba en ti, Susana. En las lomas verdes. Cuando volábamos papalotes en la época del aire. Oíamos allá abajo el rumor viviente del pueblo mientras estábamos encima de él, arriba de la loma, en tanto se nos iba el hilo de cáñamo arrastrado por el viento.”. Esto expresa lo más íntimo de Pedro Páramo, su amor hacia Susana San Juan, el cual nunca fue correspondido. Esta técnica se puede ver en diversos personajes y momentos. Por ejemplo más adelante el monólogo es usado por Susana San Juan: “Estoy aquí, boca arriba, pensando en aquel tiempo para olvidar mi soledad. Porque no estoy acostada sólo por un rato. Y ni en la cama de mi madre, sino dentro de un cajón negro como el que se usa para enterrar a los muertos. Porque estoy muerta”

    La tercera manera de ingreso de los personajes al relato, permitida por el narrador omnisciente, es mediante el estilo indirecto, estilo en el que la voz de los personajes es reproducida por el narrador, pero si se hace diferencia para recalcar que se trata de un personaje. “‘Ayúdame, Susana’. Y unas manos suaves se apretaban a nuestras manos. ‘Suelta más hilo.’”.

    Un caso en el que se suceden casi todas las formas de relato del narrador omnisciente es cuando se presenta la situación del padre Rentería:
    “Hay aire y sol, hay nubes. Allá arriba un cielo azul y detrás de él tal vez haya canciones; tal vez mejores voces… Hay esperanza, en suma. Hay esperanza para nosotros, contra nuestro pesar.
    ‘Pero no para ti, Miguel Páramo, que has muerto sin perdón y no alcanzarás ninguna gracia’
    (…)
    -¡Padre, queremos que nos lo bendiga!”.

    En conclusión podemos decir que en las novelas estudiadas existe una dualidad de narradores, ambos completamente distintos u opuestos. En La Amortajada la transición entre estos es más simple. En Pedro Páramo además de la existencia de esta dualidad narrativa, uno de los narradores se descompone en muchas voces ya que los personajes usan su voz para contar hechos del pasado. Esto hace de estas obras parte de la Literatura Contemporánea.

    1 Se usó la palabra narrador entre comillas porque en el fondo no lo son, sólo son voces de personajes que, por la complejidad de su ingreso a la obra y de su discurso, se toman como narradores.

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  6. HOLA PROFEE!! NO SE ENOJE POR LO TARDE :)



    La literatura contemporánea corresponde al siglo XX, en esta época las obras narrativas transgreden todos los cánones conocidos con anterioridad en la literatura. Una de las principales características y la cual analizaremos es la multiplicidad de puntos de vistas narrativos. Esto quiere decir que desaparece el narrador omnisciente, que sabe todo, y aparece un narrador en primera persona que expone la historia desde su propia visión de los hechos. Así mismo se genera una pluralidad de voces narrativas dentro de la misma obra. El perspectivismo plantea que no solo puede haber una sola interpretación de la realidad, sino que esto depende de cuántos sujetos distintos la observen. En esta oportunidad observaremos dos obras estudiadas en la parte tres, estas son “La amortajada” de María Luisa Bombal y “Pedro Páramo” de Juan Rulfo.

    Comenzaremos hablando de la novela mexicana “Pedro Páramo”, fue publicada el año 1955. Esta novela perteneciente al género narrativo contemporáneo, la podemos clasificar dentro del realismo mágico- maravilloso, porque se mezcla la realidad con la fantasía, la realidad representadas por la descripción de la sociedad y la fantasía por la animas. La novela se organiza mediante la superposición de planos narrativos, otra característica de la literatura contemporánea, se mezcla el presente dado por la búsqueda de Pedro Paramo y el pasado que es la historia del mismo. Estos dos planos narrativos se entrelazan mediante las voces de los distintos personajes que aparecen en el transcurso del relato.

    El primer narrador que distinguimos en la obra es el narrador personaje, es representado por Juan Preciado, el hijo de Pedro Páramo. La narración se produce en primera persona “Vine a cómala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo”. Su función principalmente es que entorno a él nace toda la acción de la historia. El protagonista narra con un cierto orden cronológico, parte de una realidad temporal, sin embargo este tiempo no es el mismo en el que esta configurado la novela. Esto le da al personaje una visión distante con respecto al mundo narrado, que le permite reflexionar sobre los acontecimientos ocurridos como hechos captados por su propia conciencia. Durante la obra este narrador se encuentra con diversos personajes, con los cuales establece dialogo en el cual predomina el estilo directo “Y todavía más allá, la remonta lejanía. – ¿Y qué trazas tiene su padre, si se puede saber? –No lo conozco – le dije-”.

    Durante el dialogo sostenido con algunos de los personajes se observa la técnica narrativa del flash back, donde los personajes recuerdan brevemente el pasado, un ejemplo es cuando Damiana cuando esta hablando con Juan Preciado “… aquí como tu ves no hay árboles. Los hubo en algún tiempo… “Ahí se recuerda brevemente el tiempo donde Comala no era una ciudad muerta sin vegetación. Otro recurso que utiliza el autor es la utilización de raccontos, que son vueltas al pasado un poco más largas, es un ejemplo cuando Eduviges narra la historia con su madre en Comala.

    Otro tipo de narrador que encontramos presente en el texto es el narrador omnisciente, la narración es en tercera persona, lo que indica que tiene focalización cero. Este narrador es fundamental dentro de la obra, de partida describe el entorno en el cual se está viviendo y conecta las acciones un ejemplo es “El padre Rentería dio la vuelta al cuerpo y entregó la misa al pasado.” Otra función que cumple este tipo de narrador en la obra es que permite el ingreso de otros narradores, es decir les presta la voz a otros personajes, los hace hablar y esto aporta a la diversidad de perspectivas de la obra. Estas diferentes perspectivas están llevadas por los personajes que intervienen, así como Pedro Páramo, Fulgor, Padre Rentería, Susana San Juan y Miguel Páramo.

    Un tipo de técnica muy utilizada por el narrador es el monologo interior, es decir cuando los pensamientos de los personajes son revelados con el fin de exponer lo más intimo del personaje. Es un ejemplo de esto el monologo de Pedro Páramo “Pensaba en ti Susana. En las lomas verdes. Cuando volábamos papalotes en la época del aire.”

    En la otra obra estudiada “La Amortajada” obra escrita por la chilena María Luisa Bombal, publicada el año 1938 también se puede observar las diferentes perspectivas del narrador. Existe un narrador personaje que es Ana María, la protagonista que se encuentra muerta ella ve a todos los que asisten a su velorio y desde esta condición narra historias y describe situaciones. Es narrado en primera persona, es decir tiene una focalización interna. El segundo narrador es el omnisciente que narra la situación en tercera persona, posee focalización cero y éste cuenta lo que sucede en el velorio de Ana María.

    En conclusión estas dos obras pertenecen a la literatura contemporánea y poseen más de un narrador que permite al lector ver distintos puntos de vista dentro de la misma obra. Se configura una visión múltiple, con desajustes entre los distintos enfoques es así como el emisor entrega su versión de los hechos, desaparece la figura del narrador como poseedor absoluto de la verdad. Esto provoca que el lector se transforme en un lector activo ya que tiene distintos planos de la historia.

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  7. Profe Mori!! perdon por no mandarlo ayer, pero supongo que la maca le madó un mail explicándole mi situación, pero hoy me desperté tempranito para ver si e desgraciado internet funcionabda y... siii!!! funciona!!! alfinal ayer me estresó el sistema!Supongo que ahora duerme y yo también quiero ir a dormir porque tengo mucho tuto. Espero que comprenda. Un abrazoo!!
    De: La mejor alumna! =)

    A partir de 1940, como convencimiento de la insuficiencia práctica y estética del realismo, los grandes creadores buscaron otros temas y ensayaron nuevas técnicas para lograr explicar el mundo, esto es lo que denominamos: la literatura Contemporánea, que abarca desde el siglo XX hasta el siglo XXI. Entre sus características encontramos el interés por los temas propios del mundo urbano (frente al predominio anterior de lo rural), se dará cabida a varios problemas humanos, y no sólo a sociales; lo fantástico aparecerá junto a la realidad. Hay un mayor cuidado constructivo y estilístico. Eco de las innovaciones formales introducidas por grandes novelistas europeos y norteamericanos. A demás se incorporan modos literarios como el monólogo interior, hay movimientos vanguardistas, soledad, incomunicación y pérdida de la identidad. Se aprecia la superposición de distintos niveles de significación, se emplean códigos oníricos, míticos e inconscientes. El conglomerado de todas estas características dará origen a una nueva novela, la hispanoamericana, donde se confirma la ampliación temática, lo rural recibirá un tratamiento novísimo, la fusión de lo fantástico y lo real dará inicio al realismo mágico, tendrá una renovación total de la estructura del relato, cuya nueva estructura será modificada por la ruptura de la línea argumental, anacronías, mezcla de técnicas, superposición de estilos y registros, distorsiones sintácticas y léxicas. Entre las características más relevantes, hallamos las múltiples perspectivas que tiene el narrador durante el siglo de los nervios, la cual será analizada detalladamente en primer lugar en base a la obra titulada como Pedro Páramo del autor mejicano Juan Rulfo y en segundo lugar, más superficialmente en base a La Amortajada de María Luisa Bombal. La obra Pedro Páramo fue publicada por primera vez en 1955, su brevedad nos sitúa en una obra pensada y hecha en el sentido de la intensidad y la concentración, y servida por un absoluto virtuosismo constructivo; lo que ubica a Rulfo en la primera línea de la narrativa hispanoamericana.
    La perspectiva o punto de vista que se adopta para narrar, es la relación que estable el narrador con el mundo que relata, y bajo este supuesto, tenemos varias posibilidades, entre ellas el grado de conocimiento; que se refiere a la capacidad de dominio que el narrador tiene sobre el mundo que relata. En la obra, encontramos dos tipos de narradores: el narrador protagonista, representado por Juan Preciado; y el narrador omnisciente. Este último se desdobla, introduciéndose en la voz de los personajes como Pedro Páramo, el padre rentaría, Fulgor Sedano, Susana San Juan y Miguel Páramo; lo que le permite al narrador omnisciente tener una multifocalización. En primera instancia, explicaremos que es un narrador protagonista y omnisciente. El narrador protagonista corresponde a un personaje de la obra narrativa que relata su propia historia o parte de ella, narrando en primera persona; mientras que el narrador omnisciente conoce, domina e interpreta todo lo que acontece. Nos entrega diversos tipos de información: ideas y emociones de los personajes; hace comentarios sobre el comportamiento de sus personajes y domina el pasado de ellos pudiendo así explicar las causas que los han conducido al momento actual. No sólo informa, también da a conocer lo que piensan, a demás de criticar y formular juicios; narrando en tercera persona gramatical. El ojo que todo lo sabe y lo ve, es naturalmente el autor, pero ese ojo entra en la novela siguiendo en un comienzo a Juan Preciado, que por encargo de su madre moribunda va a un lugar llamado Comala para ajustar cuentas con su padre: Pedro Páramo, pero inesperadamente, él se encuentra con que Comala es un pueblo muerto, vacío y en el aire enrarecido sólo se oyen voces, ecos y murmullos de fantasmas: “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera. Le apreté sus manos en señal de que lo haría, pues ella estaba por morirse y yo en un plan de prometerlo todo.” En ese ejemplo nos damos cuenta de la primera persona con el uso de palabras referidas a un “yo”.De acuerdo a su grado de focalización es interna, ya que el narrador sabe tanto como el personaje, porque la focalización coincide con la conciencia del personaje, el narrador entonces, cuenta las cosas simplemente como las ve.
    Por otro lado, tenemos el narrador omnisciente, que es representado primordialmente por Pedro Páramo, que mediante la voz, nos da a conocer su propia historia; “Me cruzaré los brazos y Comala morirá de hambre”, “Estoy comenzando a pagar…”. También nos encontramos con el padre rentaría, que es el sacerdote local, sabemos de él mediante las palabras, que como dije anteriormente, no es propiamente reflejo del narrador omnisciente, sino que éste se interna en los pensamientos de los personajes, teniendo así, varios puntos de vistas; “Trago saliva espumosa; mastico terrones plagados de gusanos que se anudan en la garganta y raspan la pared del paladar…”, “¿Qué quieres que haga contigo Dorotea? Júzgate tú misma. Ve si tú puedes perdonarte” A demás, sabemos las historias de otras ánimas como la de Susana San Juan, cuya voz sacraliza la naturaleza, exalta el amor y bordea lo pecador: “¡Señor, tú no existes! Te pedí tu protección para él. Que me lo cuidaras. Eso te pedí. Pero tú te ocupas nada más de las almas. Y lo que yo quiero de él es su cuerpo. Desnudo y caliente de amor; hirviendo de deseos; estrujando el temblor de mis senos y de mis brazos…” En cuanto a Fulgor Sedano, administrado de los bienes de Pedro Páramo, igualmente nos entrega un plano más del relato que entra en comunicación con las demás voces, un ejemplo es cuando recuerda la mala opinión que Pedro Páramo tenía de su padre Lucas Páramo; sin embargo se pregunta: “ De donde diablos habrá sacado esas mañas el muchaco?...”, al estar seduciendo mujeres para adueñarse de sus tierras. Miguel Páramo es el único hijo reconocido por Pedro Páramo, quien es un claro modelo también de una nueva focalización en la historia: “Maldito viejo, le voy a jugar una mala pasada que hasta le harán remolino los ojos.”. Debemos tener en cuenta que éstos son sólo algunos personajes que dan lugar para que el narrador omnisciente se desenvuelva, no obstante, hay varios más como lo son Eduviges, Justina, Gerardo, Abundio, entre otros. El narrador opera de diferentes modos, pero el monólogo interior es el más característico de la época, y por ende, lo que se hace más evidente en el relato. Pero, ¿Qué entendemos por monologo interior? Es el lenguaje interior que canaliza de un modo muy particular nuestros deseos y pensamientos, dicho de forma relativamente organizada con una secuencia lógica de las oraciones; es así como conocemos la interioridad de los personajes, y como ya hemos visto, cada uno indirectamente relata su historia desde su propia conciencia.
    Ahora bien, La Amortaja es otra obra paradigmática de su tendencia, publicada en 1938, que nos permite nuevamente encontramos frente al juego de perspectivas, que se repiten, contrastan e intensifican para dar forma a la novela. En ella apreciamos tres tipos de narradores: el protagonista y omnisciente al igual que en Pedro Páramo, pero a demás nos percatamos de un narrador personaje, que habla en primera persona participando de la historia. El grado de focalización del protagonista y personaje es interna, y por el contrario, el del narrador omnisciente es cero, pues conoce todos los puntos de vista, en otras palabras, el narrador sabe más que los personajes. La protagonista de la historia es Ana María, que desde su estado moribundo hace una retrospectiva de su vida a medida que asisten las personas que poblaron su vida a visitarla a su velorio: “Te recuerdo, te recuerdo adolescente. Recuerdo tu pupila clara, tu tez de rubio curtida por el sol de la hacienda, tu cuerpo, entonces, afilado y nervioso.” El primer narrador que se hace presente en la obra es el omnisciente: “Y luego que hubo anochecido, se le entreabrieron los ojos.”, “Y es así cómo se ve inmóvil, tendida boca arriba en el amplio lecho. Ahora que la saben muerta, allí están todos...”. Respecto al narrador personaje, encontramos varios de ellos: Fernando, amigo de la familia; el cura; Zoila, reemplazó a su madre y era más que un sirvienta; Alicia, hermana; Ricardo, hombre muy especial en su adolescencia; Gonzalo, su padre. Cada uno de ellos nos cuenta sus experiencias, permitiéndonos como lectores conocer la gama de situaciones ocurridas. Nuevamente nos encontramos con el uso del monólogo interior como forma discursiva: “¡Ah, Dios mío, Dios mío! ¿Es preciso morir para saber?”, “¡Oh Alberto, mi pobre hijo!”. A la vez, vemos el uso de el modo indirecto libre, procedimiento expresivo más complejo, pues supone una combinación de el estilo directo e indirecto, el narrador se mantiene presente, pero habla desde el interior del personaje, lo que produce una identificación del narrador con la interioridad del personaje: “Salvo una muerta, nadie sabe ni sabrá jamás cuánto lo han hecho sufrir esas numerosas efigies de su mujer, rayos por donde ella se evade a pesar de su vigilancia. ¿No entrega acaso un poco de su belleza en cada retrato? ¿No existe acaso en cada uno de ellos una posibilidad de comunicación?”, es un ejemplo de cómo operan los narradores a lo largo de la novela.

    A modo de conclusión, debemos enfatizar que ambas obras son representativas de la contemporaneidad, y que entre sus características, encontramos el cambio inesperado de puntos de vistas, existiendo un entrecruzamiento de voces; lo que se demuestra cuando los personajes han vivido un mismo hecho y cada uno narra lo sucedido. El modo narrativo más utilizado y que es característico del siglo es el monólogo interior, técnica influida directamente por la sicología, cuyo fin último es dar a conocer de una forma más personal el relato. La lectura de los textos no es fácil, se necesita un lector activo, que sea capaz de solucionar las circunstancias no resueltas. Sin embargo, sólo estas exigencias artísticas, son capaces de explicar la riqueza seguidora que identifica a ambos autores.

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  8. Nicolas Feres

    Pedro Páramo escrita por Juan Rulfo, es una novela mexicana la cual se caracteriza por la multifocalización, es decir por las varias perspectivas que se encuentran en ella. Esta característica es típica de la novela contemporánea. Esta multicidad se hace para que el lector quede mucho menos ajeno a la lectura, en otras palabras que el lector pueda ser parte del relato, esta características se aprecia claramente en Pedro Páramo, al igual que otras técnicas como el soliloquio y la gran cantidad de narradores que encontramos para así poder interpretar el relato de diferentes perspectivas, algo que no se podía realizar con el narrador omnisciente clásico que encontrábamos en el siglo XIX. De este último tema es el cual hablaré, comparando los narradores de la obra Pedro Páramo del mexicano Juan Rulfo con los de La Amortajada de la chilena María Luisa Bombal.
    El personaje principal de Pedro Páramo es Juan Preciado, un hombre que cuenta su travesía hacía Comala, una ciudad donde supuestamente estaba su padre, el cual lo había abandonado a él y a su madre; su madre antes de morir le había pedido que fuera a buscarlo para así vengarlo por su abandono. Los puntos de vistas de los narradores son diversos, en un principio se aprecia claramente al personaje principal narrando en primera persona singular con focalización interna, “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera. Le apreté sus manos en señal de que lo haría; pues ella estaba por morirse y yo en un plan de prometerlo todo”, durante todo el relato Juan Preciado va relatando lo que ve y lo que siente. No tan sólo podemos encontrar el narrador protagonista sino que el omnisciente, pero no el omnisciente clásico, sino que como otro personaje, en otras palabras se introduce en la voz de un personaje, durante el relato se puede apreciar cuando habla Pedro Páramo, Fulgar, Susana, Miguel, el padre Rentería entre otros; “Pensando en ti, Susana. En las lomas verde. Cuando colábamos papalotes en la época del aire. Oíamos allá abajo el rumor viviente del pueblo mientras estábamos encima de él…”, en esta cita se ve reflejado al narrador omnisciente en voz de Pedro Páramo, cuando el narrador omnisciente habla lo hace con una focalización cero.
    Otro recurso que utiliza el narrador es la gran cantidad de flashbacks que se aprecian, cuando cada personaje relata algo que ocurrió en el pasado; un ejemplo es cuando Eduviges habla con Juan Preciado, “- Me parece raro. Claro que entonces éramos unas chiquillas. Y ella estaba apenas recién casada. Pero no queríamos mucho”, en esta cita podemos ver como recuerda en brevedad a la madre de Juan Preciado, palabras como éramos, estaba, son las que nos ayudan a poder identificar que esta recordando algo que ocurrió en el pasado.
    El narrador omnisciente utiliza otra técnica que podemos identificar claramente en el relato, el monólogo interior o soliloquio, no lo utiliza tanto pero si en ocasiones importantes, como en el monólogo del Padre Renterías, cuando en sus profundos pensamientos cuanta como Pedro Páramo reconoce y recibe a Miguel Páramos como su hijo legítimo, algo que no era muy común en Pedro Páramo, ya que tenía la característica de no reconocer mucho a sus hijos, lo que hizo con Juan Preciado.

    En la obra escrita por María Luisa Bombal, al igual que en Pedro Páramo hay presencia de un narrador protagonista, se ve en manos de Ana María una mujer la cual muere y está siendo velada. Ella cuanta su historia personal y las historias que ha vivido con cada persona que la va a visitar; también encontramos el flashback incluso más que en Perdo Páramo ya que en cada caso que la va a ver alguien comienza a recordarse lo vivido. La novela La Amortajada se caracteriza por la gran cantidad de sentimientos que se reflejan a cada instante algo que no se ve del todo en Pedro Páramo. Podemos encontrar un narrador omnisciente, se puede decir que relata lo que ocurre en el presente, es decir con cada visita que le hacían, ya que lo que iban contando en el pasado lo hacía Ana María cuando recordaba lo vivido.

    Para finalizar podemos concluir que la novela de Pedro Páramo presenta la multifocalización de puntos de vistas, mostrando diferentes caras de como se ve la narración para así poder hacer que el lector forme parte del relato; utilizando el narrador protagonista y el narrador omnisciente al igual que en La Amortajada; esto nos hace concluir definitivamente que estamos frente a dos grande ejemplares de la literatura contemporánea.

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  9. PROFE PERDOONE EL ATRASO ES QUE MI INTRENET SE HECHO A PERDER POR LO CUAL HOY DIA TUVE QUE MADRUGAR PARA PODER IR A UN CIBER ES POR ESO QUE NO SE LO ENVIE AYER. ESPERANDO SU COMPRENSION SE DEPSIDE ATENTAMENTE NICOLAS FERES

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  10. Profe.. espero me discuple por el retraso. Desde ya mil gracias, un abrazo. nati castro

    La literatura del siglo XX ha dejado de ser una disciplina de forma y estructura rígida conforme a la estructura del canon clásico. En las novelas contemporáneas se pierde la imagen de una realidad “única”, desaparece la figura del narrador omnisciente poseedor de la verdad absoluta. Surge entonces, el relativismo donde la historia se presenta desde diferentes puntos de vistas- múltiples narradores. Dentro de los métodos presentativos utilizados por la multiplicidad de narradores encontramos la interacción directa entre narrador y personajes através de diálogos, monólogos, soliloquios, y en algunos casos el correr de la conciencia. Para afirmar lo anteriormente mencionado analizaré y caracterizare a los narradores de dos obras pertenecientes a la sección 3, “Pedro Páramo” y “La Amortajada” de Juan Rulfo y Ma.Luisa Bombal, respectivamente.

    Pedro Páramo, gran novela mexicana del siglo XX, es quizás una de las obras más subversivas de la época contemporánea, cuenta con una increíble riqueza técnica graficada en aspectos tales como el constante uso de anacronías, la utilización de un lenguaje poético, y la multifocalización narrativa. En esta última hacemos referencia a la presencia de a lo menos dos narradores distintos que dan a conocer su punto de vista objetivo de la historia. Como primer narrador encontramos a Juan Preciado (primogénito de Pedro Páramo, personaje principal) quien narra su sentir en primera persona. El grado de conocimiento que ostenta este narrador en relación al resto del mundo narrado es muy reducido, sin embargo, es capaz de establecer una relación directa con los componentes que conforman el mundo narrado, ya sea a través de diálogos con los personajes como la idealización del entorno por parte de los narradores.

    Hay allí, pasando el puerto de Los Comilotes, la vista muy hermosa de unas llanura verde, algo amarrilla por el maíz maduro. Desde ese lugar se ve Comala, blanqueando la tierra, iluminándola durante la noche>> Y su voz era secreta, casi apagada, como si hablara consigo misma….mi madre.
    -¿Y a qué va Ud. a Comala, si se puede saber?
    -Voy a ver a mi Padre- contesté.
    -¡Ah!- dijo él.
    Y volvimos al silencio.

    El segundo narrador que encontramos intrínsicamente formando parte de la novela es el hablante básico o también conocido como narrador omnisciente. La narración del hablante
    Básico suele entrecruzarse con el relato objetivo del narrador protagonista, muchas veces dificultando la coherencia y correcta comprensión de la obra. Ejemplo:

    -Te he dicho que salgas del excusado, muchacho
    -Sí, mamá. Ya voy.
    De ti me acordaba. Cuando tú estabas allí mirándome con tus ojos de aguamarina.
    Alzó la vista y miró a su madre en la puerta.

    Se desprende del ejemplo anterior y de lo anteriormente mencionado, que la novela contemporánea no solo destaca por su multifocalización narrativa, si no, además, involucra de manera activa al lector, confiriéndole la autorización de crear su propio punto de vista con respecto a la historia y establecer los nexos de coherencia entre los entrecruzamientos caóticos de los narradores.

    Finalmente si se deseara establecer una semejanza entre la novela mexicana Pedro Páramo y la obra chilena “La amortajada” podríamos decir que ambas novelas cuentan tanto con un narrador personaje como un narrador omnisciente. Este último logra desdoblarse durante el transcurso de la historia, en otras palabras, cuenta con la capacidad de introducirse dentro de los personajes de tal forma que les permite a través de su voz, en primera persona. El narrador omnisciente hace entrega de su voz a los personajes de la historia. Por ejemplo en La Amortajada el narrador omnisciente permite que personajes como Fernando, y amigos de Ana María (que van a visitarla tras su muerte), cuenten y expresen sus sentimientos e inquietudes con respecto a lo acontecido. Por otro lado encontramos en la novela Pedro Páramo a personajes como el Padre Rentería, Eduviges, Dorotea, entre otros.

    Llegó hasta el río y allí se entretuvo mirando en los remansos el reflejo de las estrellas que se estaban cayendo del cielo. Duró varias horas luchando con sus pensamientos, tirándolos al agua negra del río.
    El asunto comenzó- pensó- cuando Pedro Páramo, de cosa baja que era, se alzó a mayor. Fue creciendo como una mala yerba. Lo malo de esto es que todo lo obtuvo de mí: “Me acuso padre que ayer dormí con Pedro Páramo.” “Me acuso padre que tuve un hijo de Pedro Páramo.” “De que le presente a mi hija a Pedro Páramo.” Siempre esperé que él viniera a acusarse de algo; pero nunca lo hizo.

    A modo de síntesis, entonces podemos afirmar que la multiplicidad de puntos de vista o focalizaciones narrativas, la imagen dual de la realidad representada en el mundo narrado son características de gran implicancia en las obras contemporáneas, tal es el caso que han permitido u obligado a los lectores a interpretar el sentido de lo que hacen, dicen o sienten los personajes de una historia. El lenguaje poético utilizado en las novelas de Juan Rulfo y Ma.Luisa Bombal son de alguna forma un indicio de lo que ha de ocurrir en la historia. Algunos métodos presentativos implementados tanto por los narradores omniscientes como protagonistas son la interacción directa a través de diálogos entres el narrador y otros personajes, el monologo interior, el soliloquio y el correr de la conciencia. La amplia gama de modos presentativos de los narradores, su focalización y entrecruzamiento con las narraciones de otros tipos de narradores, causan un caos narrativo de tal envergadura que obligan al lector intentar encontrar un orden lógico, coherente entre las partes de la una obra.



    Natalia Castro R.

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  11. Profe.. el sistema no me autorizó subir mi comentario con algunas comillas ni la letra cursiva .. Espero lo tome en cuenta a la hora de leer las sitas textuales de mi respuesta. Gracias.

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  12. Profe la tardanze es debido principalmente a 2 problemas:
    1. Mi libro "la amortajada" presentada indicios de listeria por lo cual tuve que realizarle examenes, afortunadamente no era nada grave.
    2. Mi gran problema de ortografia que me hizo subir mi trabajao a casteYanosstjohns2009.blogspot.com, recien me entere que castellano era cn ll.

    Espero su conprension, gracias.

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  13. La narrativa del siglo XIX sufre un fuerte cambio a partir del siglo XX, la visión univoca se ve reemplazada por la característica pluralidad de voces de las novelas contemporáneas. Un hito de la historia hispánica contemporánea es Juan Rulfo por su gran maestría para llevarnos de los real a lo fantástico, esto se ve plasmado en su novela “Pedro Páramo” en la cual este recurre al recurso de la multiplicidad de puntos de vista narrativas que llegan al punto de incluso impedirnos seguir con facilidad el hilo del relato. Analizare a continuación los tipos de narradores presentes en “Pedro Páramo” de Juan Rulfo y “La Amortajada” de María Luisa Bombal, ambas pertenecientes a la sección 3.

    “Pedro Páramo” presenta 2 tipos de narradores, que es el protagonista y un segundo el cual se podría catalogar como omnisciente, este último tiene una peculiar característica que hace que presente diferentes puntos de vista dentro de la obra, este se desdobla en varios personajes, introduciéndose en ella y revelando sus puntos de vistas al lector. Para empezar tomaremos el caso del protagonista, Juan preciado, este encarna el narrador protagonista en primera persona, “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera. Le apreté sus manos en señal de que lo haría, pues ella estaba por morirse y yo en un plan de prometerlo todo.” Además presenta una focalización interna, como se logra aprecia que el narrador sabe tanto como el personaje y nos cuenta las cosas tal como las ve. Luego tenemos el particular narrador omnisciente el cual como anticipe permite el ingreso de otros personajes, les presta la voz para hacerlos hablar y mostrar su perspectiva, esto lo podemos aprecia en Pedro Páramo, “Pensando en ti, Susana. En las lomas verde. Cuando colábamos papalotes en la época del aire. Oíamos allá abajo el rumor viviente del pueblo mientras estábamos encima de él…” Pedro Páramo abre sus sentimientos de la infancia a través de otra técnica, el monologo interior, en el cual el relato se centra en los pensamientos del personaje, o también en el Padre Rentarías, “¿Qué quieres que haga contigo Dorotea? Júzgate tú misma. Ve si tú puedes perdonarte” nuevamente se muestran los sentimientos del personaje, en este caso del Padre Rentarías quien muestra su frustración al verse sumiso por el poder omnímodo de Pedro Páramo quien incluso rompía los principios eclesiásticos. También el narrador omnisciente se veía plasmado en personajes como Fulgor Sedano, Susana San Juan y Miguel Páramo.

    En “La Amortajada” se nos presentan los mismos 2 tipos de narradores, el protagonista y el omnisciente. El primero lo encarna Ana María, mujer recién fallecida la cual esta siendo velada y se encuentra dentro del ataúd, esta nos va contando las experiencia que vivió con cada uno de los personajes que se encuentran visitándola y además su historia personal. En el segundo caso encontramos a cada uno de los que se posan a un costado de la protagonista y van relatándonos cada una de las emociones que viven en cada instante lo cual convierte esta novela en una nostálgica, plagada de emociones.

    En conclusión puedo afirmar que la multiplicidad de puntos de vistas narrativos esta plasmado en obras contemporáneas, sin duda las obras estudiadas son un claro ejemplo que la mezcla de monólogos interiores, soliloquios, narradores omniscientes y protagonistas, es decir, la mezcla de técnicas narrativas permite darle verisimilitud a lo narrado, mayor realidad y hacerlo a la vez mas complejo al momento de leerlo, lo cual lleva en consecuencia a que el lector se active, participe mas de la lectura y se interne de una manera fantástica hasta llegar al punto de sentirse parte de ella.

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  14. Profe, mi tardanza se debia a factores de fuerza mayor
    1: No tenia internet en mi casa y me acaban de poner
    2: Los mejores trabajos se dejan al final, ya que asi no se desmotivan mis compañeros al ver una obra maestra.
    3: Mi religion no me deja usar inernet.
    4: Mi perro se comio mi computador
    5: Rodrigo Catro es afeminado
    PD: Tenga presente que, al igual que mis compañeros clasicos, nos guiamos por las intrucciones, por lo que nuestros trabajos estan en el margen de poalabras establecido. Considere esto para evaluar los trabajos en cuestion, y bajar puntajes a los trabajos que excedan dichos parametros de forma descomunal.
    Atte, el mejor

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  15. Profesor Mora:

    Espero que Max Brown le mandara el mail con nuestra situacion, pero porsiacaso le diré que cometí el error de preguntarle la página al señor Castro que, como ud. sabrá, tiene problemas mayores de ortografía.

    Fernando I. Barria




    PEDRO PARAMO

    La literatura del siglo XX rompe un poco los esquemas con los cuales se había escrito hasta ese momento. La necesidad de un lector activo y la desaparición del clásico narrador omnisciente, que había caracterizado las obras literarias del pasado, son algunas de las características principales del nuevo movimiento literario que empezó a surgir en este período, la literatura contemporánea. El ya trillado modo narrativo de antaño fue sustituido por una multifocalización de los hechos, en donde existían múltiples puntos de vista y perspectivas hacia los acontecimientos, es decir, múltiples narradores dentro de una misma obra con diferentes características. Un clarísimo ejemplo de este nuevo estilo de narración nos lo presenta la excepcional novela “Pedro Páramo”, en la cual existen múltiples narradores de toda clase.

    “Pedro Páramo” es una novela escrita por el mexicano Juan Rulfo a mediados del siglo XX y publicada por primera vez en 1955. Es considerada una de las grandes obras de la literatura contemporánea latinoamericana, por su calidad excepcional. Es una obra caracterizada por el excelente uso del lenguaje donde se presenta una sucesión de hechos en forma anacrónica y existe una multifocalización por parte de numerosos narradores, que fue lo acotado anteriormente y que será el tema en el cual se centrará este ensayo.

    La novela presenta dos estilos narrativos distintos. El primero es el narrador en primera persona singular protagonista que corresponde a la focalización de Juan Preciado y es el que inicia el relato. Su focalización es interna e inicia de la siguiente manera:

    “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo en cuanto ella muriera”.

    La cita pone en evidencia sus características como narrador. Todo lo que él narra corresponde al período temporal en que Pedro Páramo ya había muerto y su hijo, Juan Preciado, va a Comala con la inasequible intención de conocerlo. De alguna forma, sin embargo, mientras él va conociendo y conversando con los distintos personajes se van desarrollando pequeños pasajes en los cuáles otros personajes van tomando el rol de narrador y en especies de racconto van contando historias del pasado que conciernen al pueblo. Por esta presencia de diálogos también se puede afirmar que en la narración de Juan Preciado, y de hecho en toda la novela, predomina el estilo directo. Por ejemplo Juan Preciado narra textualmente las palabras de su madre cuando ella describía el pueblo de Comala:

    “Hay allí, pasando el puerto de Los Colimotes, la vista muy hermosa de una llanura verde, algo amarilla por el maíz maduro. Desde ese lugar se ve Comala, blanqueando la tierra, iluminándola durante la noche”.

    El otro estilo narrativo que predomina en la novela es el narrador clásico omnisciente en 3ra persona plural con focalización cero. Este narrador corresponde al período en que Pedro Páramo aún vivía y relata los sucesos de Comala durante distintas etapas de la vida de Pedro. También se abre a narrar sobre otros protagonistas que corresponden a otros habitantes del pueblo durante ese tiempo, antes que se volviera un pueblo fantasma, y también acepta pasajes en los que, por ejemplo, Pedro Paramo realiza una especia de monólogo interior lo que reafirma la característica de omnisciencia:

    “Pensaba en ti Susana. En las lomas verdes. Cuando volábamos papalotes en la época del aire. Oíamos allá abajo el rumor viviente del pueblo mientras estábamos encima de él, arriba de la loma, en tanto se nos iba el hilo de cáñamo arrastrado por el viento (…)”

    Otros personajes que se adentran en el relato de este narrador son Fulgor Sedano, Susana San Juan, el padre Renterías y Miguel Páramo.

    En epítome puedo concluir con gran seguridad que ‘Pedro Páramo’ cumple con una gran diversidad de narradores y una multifocalización de los hechos narrados, lo que es una característica esencial y casi imprescindible de la literatura contemporánea. Esta mezcla de narraciones le da más complejidad al texto lo que responde a otra característica de la literatura contemporánea como lo es la necesidad de un lector activo quien, de cierto modo, puede crear su propio punto de vista con respecto a los acontecimientos y establecer sus propias relaciones y cruzamientos gracias a la ya mencionada multifocalización de los hechos.

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  16. Durante el siglo XX, las novelas de aprendizaje marcaron una tendencia y esto se tradujo en que muchas obras de este periodo mostraran la trayectoria de un personaje desde su infancia hasta su madurez sicológica. Este tipo de forma de contar la historia de un determinado personaje, se vio influenciada en parte por el ascenso de una clase social, el proletariado, quien desde la pobreza surgió hasta ser una clase importante. Los autores trataron de plasmar este tipo de evoluciones que podían tener sus personajes. En novelas estudiadas como Pedro Páramo y La Amortajada de Juan Rulfo y Maria Luisa Bombal respectivamente, se muestra como sus personajes principales, de una u otra manera, se van desarrollando y culminan en lo que se considera su madurez sicológica.

    En Pedro Páramo la evolución del personaje se encuentra de forma más encriptado, por lo que hay que fijarse en los pequeños detalles de los que se pueden desprender la forma en que se desarrolla. El ascenso económico que lleva a Pedro Páramo desde no tener nada a ser el dueño de Cómala puede ser considerado como la evolución y aprendizaje del personaje. Queda plasmado su pobreza inicial en, por ejemplo:
    “-Dile que te de un metro de tafeta negra como esta – y le dio la muestra-. Que lo cargue a nuestra cuenta.
    - Muy bien mamá.”
    El dinero en la familia de Pedro Páramo escaseaba, echo por el cual tenían que pedir fiado y endeudarse con la gente para poder conseguir distintos productos, los cuales no podían pagar.
    “- Se lo pagaremos en las cosechas.
    - Sí, abuela”

    Las promesas de pago era la única salida que tenía la familia para poder salir adelante. Sin embargo, al parecer estas deudas continuaron y aumentaron a medidas que pasaban los años, ya que cuando Pedro Páramo se hace cargo de una Media Luna completamente quebrada.
    “-Mal. No queda nada. Hemos vendido el último ganado.
    “- ¿A quien le debemos?” No me importa cuanto, sino a quien.
    “Repasó la lista de nombres. Y terminó:-No hay de donde sacar para pagar. Ése es el asunto.
    “-¿Y por qué?
    “-Porque la familia de usted absorbió todo. Pedían y pedían sin devolver nada. Eso se paga caro (…).

    La situación al heredar el fundo de la Media Luna no era la mejor de todas. Las deudas lo tenían con la soga al cuello, y era casi imposible salir del poso en el que se encontraba, quebrado completamente. Pero, la habilidad de Pedro Páramo, o mejor dicho su cambio de actitud, lo llevará a ser dueño de Comala. Este cambio, que también es parte de su evolución, queda plasmado a continuación:
    “Yo no esperaba nada de él. ‘Es un inútil’, decía mi difunto patrón. ‘Un flojo de marca’. Yo le daba la razón. ‘Cuando yo muera váyase buscando otro trabajo, Fulgor.’(…) ‘No se cuente con él para nada, ni para que me sirva de bordón servirá cuando yo esté viejo’.”

    Este fragmento muestra que Pedro Páramo era considerado por su padre un completo inútil y bueno para nada. A continuación, se dará un ejemplo de la situación final de Pedro Páramo:
    “Bueno, pues eso es la Media luna de punta a cabo. Como quien dice, toda la tierra que se puede abarcar con la mirada. Y es de él todo ese terrenal”

    Esta cita deja en claro que no solo pudo con las tremendas deudas, sino que también aumentó los terrenos de la Media Luna. Se convirtió, entonces, de una persona sumida en la pobreza a un hombre de muy buena situación económica. Y su evolución no solo fue económica, sino que también, se convirtió de un don nadie, a la persona más influyente e importante de Comala.
    “-Me cruzaré de brazos y Comala se morirá de hambre.
    “Y así lo hizo”

    En el caso de la amortajada, eso si la evolución del personaje principal se hace una vez que está muerta, ya que es en ese momento que ella comienza a reflexionar sobre su vida y comienza a analizar sus actos, dándose cuenta de sus errores y aciertos, por lo que se puede considerar que fue una novela de aprendizaje de carácter subversivo, ya que Ana María tiene alcanza su madurez sicológica una vez que está muerta. Además, una vez muerta, Ana María sigue aprendiendo del entorno que la rodea y de las personas que la van a visitar. Este tipo de aprendizaje, es muy contrario al experimentado por Pedro Páramo, ya que aparte de no estar explicado en forma tan encrucijada, rompe con lo normal ya que sucede una que está muerta.

    En modo de epítome, tanto la novela de Juan Rulfo como la de María Luisa Bombal, muestran como sus personajes principales se van desarrollando a lo largo de la novela hasta el punto de alcanzar su madurez sicológica. Aunque la forma de mostrar esta evolución en ambos casos fue distinta, ya que en la novela La Amortajada esta madurez se alcanza tras la muerte, queda claramente mostrada la evolución de ambos personajes y como van aprendiendo a partir de emociones, actos, y situaciones, que los llevan a ser personas más completas.

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  17. Vicente Huerta, pregunta 1

    Hasta el antes del siglo XX, el punto de vista dentro de una novela que predominaba era un punto de vista único que era relatado por el narrador únicamente. En éste los puntos de vista de personajes sólo se podían dar a conocer cuando el narrador era omnisciente y éste es quien debe expresar los pensamientos de los personajes o cuando el narrador era un personaje solo se puede saber el punto de vista de este personaje y un poco de otros participantes de la novela a través de lo que expresan cuando hablan.
    Hacia finales del siglo XIX y sobre todo en el siglo XX, surge la literatura contemporánea, la cuál tiene un trasfondo distinto al de cualquier corriente literaria hasta la época. Nuevos temas y fines literarios implicaron nuevas técnicas y nuevos énfasis, por ejemplo la pérdida del sentido cronológico, la inmersión en el subconsciente de los personajes y la multiplicidad de narradores y puntos de vista. En éste último me voy a focalizar usando como texto “Pedro Páramo” (1955) del autor Mexicano Juan Rulfo.
    La obra de Juan Rulfo comienza cuando Juan Preciado está pronto de llegar a Comala, la ciudad de la cual proviene su madre y donde él va a buscar a su padre. Aquí nos encontramos con el primer narrador. Éste es un narrador protagonista, ya que en los sucesos que el relata él es el centro de la obra, por lo menos hasta ahora y es probablemente el narrador protagonista más influyente de la obra. En esta primera parte podemos ver el primer punto de vista, que parte saber realmente dónde va, porque solo va a Comala por cumplirle una promesa a su recién difunta madre; ni tiene una noción de qué lo esperará en este pueblo.
    Lo primero que podemos darnos cuenta de lo que piensa es un gran cariño por su madre y la intriga por saber acerca de Comala y de su padre. A Juan Preciado lo acompaña un arriero llamado Abundio Martínez. Luego Juan Preciado llega a Comala y ahí se queda hasta el final durante unos cuantos días hasta que muere por el susto que le causan los murmullos de la ciudad una noche en la plaza. Aquí, en la ciudad donde vivió su madre, Juan Preciado desentierra la historia del verdadero protagonista de la novela, Pedro Páramo. La primera sensación de extrañeza que siente Juan en este pueblo es en la casa de Eduviges Dyada, una mujer que el arriero le dice que le daría alojamiento y así lo hizo. Aquí siente extrañeza cuando Eduviges le dice que su madre le avisó que Juan iría a Comala, y cuando le dicen que Abundio ya había
    muerto, solo que en ésta primera parte Pedro Páramo asume que Eduviges estaba loca y el arriero no era Abundio.
    “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro
    Páramo. Mi madre me lo dijo. Y yo le prometí que vendría a verlo... no pensé cumplir
    mi promesa. Hasta ahora que pronto comencé a llenarme de sueños, a darle vuelo
    a las ilusiones…
    No supe qué pensar. Ni ella me dejó en qué pensar…
    Abundio ya murió. Debe haber muerto seguramente. ¿Te das cuenta? Así que no puede ser él (Eduviges)… Estoy de acuerdo con usted”
    Juan Preciado se da cuenta de que realmente estaba en un lugar donde habitan muertos. Primero él piensa, junto al lector probablemente, que Eduviges tiene una capacidad para comunicarse con los muertos, pero después Damiana, una mujer que se le presenta en la casa de Eduviges, le dice a éste que Eduviges realmente estaba muerta. Posteriormente Juan Preciado se da cuenta de que Damiana Cisneros es al igual un fantasma. En este punto Juan Preciado piensa que está realmente habitando con fantasmas y en “la boca del infierno”, lo que lleva a Juan a morir de miedo en la plaza debido a los miles de murmullos que sentía de todas las almas que vagaban de noche por la ciudad buscando el perdón de sus pecados o que alguien rece por ellos.
    Un segundo narrador que nos podemos encontrar cuando se relatan las historias de la infancia de Pedro Páramo. Éste se muestra al comienzo como en tercera persona omnisciente, pero tiene ciertas intervenciones en primera persona en las cuales se expresan los pensamientos de Pedro Páramo. En los primeros pensamientos y también por lo que dice Pedro Páramo es su inconformismo, su desagrado a la sumisión y a la mediocridad; además de el profundo amor que sentía desde pequeño por Susana San Juan. A medida que va creciendo, nos enteramos de su vida a través de distintos personajes que hablan acerca de él y éste narrador omnisciente que vuelve a aparecer en distintas ocasiones. Pedro Páramo poco a poco se convierte en el centro de la historia, y uno se va dando cuenta de todo su poder y personalidad. Se muestra como una persona aprovechadora, de carácter fuerte, altanero, que gusta del poder y maquiavélico. No muestra una verdadera afección por nadie, excepto por su hijo Miguel y su amor por Susana. Su forma de pensar es totalmente autoritaria, y llega a tener poder en todos ámbitos, incluyendo el religioso y militar, pero lo que nunca consigue es el verdadero amor, ya que cuando consigue estar con Susana, esta se había vuelto loca por la muerte de su marido.
    “Pensaba en ti Susana. En las lomas verdes cuando volábamos papalotes en la
    época del aire…y una de tus manos suaves se apretaban a nuestras manos…
    Pedro Páramo abrió la puerta y se estuvo junto a ella, y cubrió el cuerpo desnudo…
    Cubrió el cuerpo desnudo que siguió debatiéndose como un gusano en espasmos
    Cada vez más violentos. Se acercó a su oído y habló <<¡Susana!>>…¿Sabías Fulgor, que esta es la mujer más hermosa que se ha dado a la tierra? Llegué a pensar
    Que la perdí para siempre. Pero ahora no tengo ganas de volverla a perder…
    (Ahorra con respecto a su poder y personalidad) Como tú quieras. Pero no se te olvide el don…No habrá lienzos. La tierra No tiene divisiones. Piénsalo, Fulgor,
    aunque no se lo des a entender…Bueno le voy a prestar otros trescientos hombres para que aumenten su contingente…”
    Otra voz que también es posible encontrar en el relato es la del Padre Rentería. Éste es un sacerdote en Comala quien está a total merced de Pedro Páramo. El no tiene el valor para enfrentarlo y simplemente hace todo lo que se le pida, y a lo más cuando no está dispuesto a hacer lo que se le ordena, se le ofrece un simple soborno para hacerlo ceder. En su mente él se siente culpable e incluso va a visitar un obispo para obtener el perdón por sus pecados, pero no se lo conceden.
    La mayor parte de las voces del libro son voces de mujeres ya muertas, donde sus historias no son realmente lo que importa, sino las historias que cuentan acerca don Pedro y sus relacionados, por ejemplo la muerte de Miguel Páramo. Sus acciones mientras vivas no son más que personajes secundarios y en algunos casos son solo mencionadas ellas en éstas historias, como sería el caso de Dorotea, la mujer que está enterrada junto a Juan Preciado, quien solo fue mencionada cuando viva como una loca que adora a los niños. Damiana era una simple sirvienta quien participó hasta la muerte de Don Pedro, pero no trasciende más que eso. Pareciera que éstas como no son tomadas en cuenta mientras viven, intentan trascender en lo posible una vez muertas. Esto se podría demostrar cuando Damiana Cisneros camina por la Media Luna junto a Juan Preciado, pero una vez que éste le pregunta si ella está realmente viva no sabe como reaccionar y simplemente se desvanece, o el sentimiento de Dorotea de sentirse como una persona inferior. Acá podríamos encontrar una intertextualidad con la novela “La Amortajada” (1938) de María Luisa Bombal, ya que en ésta la protagonista solo puede llegar a hablar lo que realmente siente una vez muerta, novela en la cuál también se utiliza la multiplicidad de voces. Esto tiene que ver con la participación de la mujer en la vida real para la época, que buscaba trascender, pero todavía no lo lograba.
    “Aunque me llamo Dorotea. Pero da lo mismo… ¿La ilusión? Eso cuesta caro. A mí me costó vivir más de lo debido. Pagué la deuda de encontrar a m hijo que no fuei…Ha de ser Dorotea la Cuarraca. Es la única que le gustan los bebés… ¿Querías ver si allá encontrabas tu hijo, no, Dorotea? Pues bien, no podrás ir ya más al cielo…
    -¿Está usted viva, Damiana?, ¡Dígame, Damiana! / Y me encontré solo de pronto en aquellas calles vacías…”
    En el libro hay dos mujeres con mayor importancia en las acciones, y que cuando vivas hay alguien que realmente las aprecie. Una es Dolores, la madre de Juan Preciado, quien por gracias a ella Juan llega a Comala, y su hijo sentía una gran afección por ella, aunque mientras ella estaba en Comala, Pedro Páramo solo la ignoraba y usaba. Ésta muestra sus puntos de vista acerca de Comala en ciertas intervenciones en el que describe de forma idílica éste pueblo que ahora parece maldito, y luego tiene u intento de conversación con su hijo una vez que éste muere, pero no logra comunicarse con él. La otra es indudablemente Susana, solo que está loca, pero de todos modos es capaz de captar toda la atención de Pedro Páramo, que lo lleva a una perdición paulatina tras la muerte de ésta. Ella muchas veces expresaba lo loca que se encontraba y como extrañaba a su madre y su difunto primer esposo. Rulfo da una gran evidencia de ello al decir que Susana muere un 8 de diciembre, que corresponde al día de la Inmaculada Concepción, día celebrado a la virgen María en la religión católica.
    “Allá harás mi querencia. El lugar que yo quise. Donde los sueños me enflaquecieron. Mi pueblo, levantado sobre la llanura. Lleno de árboles y de hojas, como una alcancía donde hemos guardado nuestros secretos… - ¿No me oyes?- pregunté en voz baja / -¿Dónde estás? / -Estoy aquí, en tu pueblo. Junto a tu gente. ¿No me ves?/ -No, hijo, no te veo…”
    En conclusión, en la obra de Juan Rulfo se usa el recurso de la multiplicidad de voces, y con éste se cuenta la obra mostrando los distinto puntos de vista de los personajes, desde los más revelantes hasta algunos bastante pasajeros. De éste modo se le da voz a las personas segregadas por la sociedad, algo buscado por los escritores contemporáneos dentro de su crítica. Dentro de los principales puntos de vista encontramos los de Juan Preciado y el de Pedro Páramo. Hay otros dos personajes indispensables en la obra, pero que lo que piensan no es de mayor relevancia, como el caso de Dolores y Susana San Juan. Se pueden encontrar los puntos de vista y relatos de muchos otros personajes de menor relevancia en las acciones, que son personajes secundarios en la historia del pueblo o su función principal es relatar sucesos de éste. La maestría alcanzada por Rulfo para éste recurso es evidente, y la trascendencia del libro no solo tiene que ver con los recursos utilizados, sino también con el significado de transfondo que tienen éstos.

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  18. Profesor! el fernando barría se suponía le iba a mandar el mail con nuestra situación, hubo un mal entendido ahí, pero bueno no hay problema, ya que estoy justo en la hora parece, a las 12 no?

    Saludos y Gracias por su paciencia
    PD: es cierto lo argumentado por carbonell, algunos nos guiamos por la pauta, que explicitaba 700 palabras,apoyo ami compañero en su manifiesto.

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  19. La multiplicidad de narradores y puntos de vista es algo que está muy presente en la narrativa contemporánea, en contraste con las obras del siglo XIX en las que había solamente un único narrador. Lo anterior está muy bien representado en Pedro Páramo, novela escrita por el mexicano Juan Rulfo y publicada en 1955, en donde la pluralidad de voces es visible a lo largo de casi toda la obra, lo que hace que el lector participe más activamente de la lectura y pueda conocer en mayor detalle los hechos y sentimientos desde la perspectiva del resto de los personajes. La novela de Rulfo presenta dos tipos de narradores que serán analizados a continuación.

    El que primero se presenta es el narrador de tipo protagonista, que en este caso recae en Juan Preciado, ya que cumple con todas las características correspondientes, es decir, primera persona, singular y focalización interna. A través de este narrador solo podemos ver su punto de vista, que se ve reflejado al iniciar el relato “-Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo” y citas como la anterior son recurrentes a medida que el narrador protagonista va narrando y describiendo lo que hace y piensa. Además durante el transcurso de la obra Juan Preciado va teniendo diálogos con distintos personajes en los cuales prepondera el estilo directo.

    El autor hace uso de dos técnicas de narración a través del narrador protagonista, que se desarrollan cuando este se encuentra con otros personajes, nos referimos al flashback y al racconto. La primera técnica se observa cuando el resto de los personajes hacen breves referencias a su propio pasado o al del pueblo, como se observa en el caso siguiente “-Este pueblo está lleno de ecos... hubo un tiempo que estuve oyendo durante muchas noches el rumor de una fiesta”. Mientras que la segunda técnica es más común y se ve reflejada muchas veces cuando algo que le ocurre u observa el narrador protagonista desemboca en recuerdos de su madre en él, los que generalmente eran sobre Comala y finalmente resultan ser muy contrarios a los que el protagonista ve delante de sus ojos “…Llanuras verdes… el color de la tierra, el olor de la alfalfa y del pan, un pueblo que huele a miel derramada…” de esa forma el autor cambia de punto de vista al contrastar los recuerdos del narrador con la realidad del presente. El mismo racconto también se utiliza en los discursos de los personajes con los que el protagonista entabla conversaciones, agregando a la vez más puntos de vista a la historia narrada por Juan Preciado, el ejemplo más claro es cuando Eduviges le cuenta a Juan Preciado la historia de cuando ella estuvo a punto de ser su madre.

    Luego surge el narrador omnisciente, que narra en tercera persona y posee un grado de focalización cero. Este narrador se desdobla y le “presta” la voz al resto de los personajes, lo que hace que haya más puntos de vista, como lo son los de Pedro Páramo, Miguel Páramo, Fulgor Sedano, Susana San Juan, Padre Renterías, Damiana Cisneros y Dorotea, los cuales asumen la voz en primera persona. Este narrador para presentar los distintos puntos de vista, simplemente va rotando a los protagonistas a medida que avanza la obra y así se va adquiriendo un mayor conocimiento con respecto a la historia, ya que se poseen prácticamente todas las versiones.

    Una técnica que utiliza este narrador es el monologo interior, en el cual el protagonista nos presenta sus sentimientos y se devela lo más intimo de su ser, y estos pensamientos dan la sensación de no estar controlados por el autor, “De ti me acordaba. Cuando tú estabas allí mirándome con tus ojos de aguamarina”, gracias a esto podemos conocer lo más intimo de los personajes e ir haciéndonos una clara imagen de la personalidad y vivencias de estos mismos.

    En síntesis, se corrobora nuestra tesis al fundamentar y ejemplificar a través de citas textuales la multiplicidad de narradores y a la vez puntos de vista presentes en la obra. Al unir al narrador protagonista que en este caso es Juan Preciado con todos los narradores omniscientes se forma la historia, porque basándose en un solo personaje no se llega a ningún lado, y ese es el objeto de esta novela, entrar en los distintos personajes con el fin de armarse la historia y entender a la perfección la situación en la que se encontraban, para así uno mismo creer ser el protagonista de la novela, que es el fin de las novelas contemporáneas.

    max brown

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  20. Profe Mori: Debo decir que considero las escusas presentadas por mis compañeros lo más penoso que he leido en mucho tiempo. Como usted sabe, tengo una razon válida y de peso para entregar el ensayo un Lunes en la tarde, sin tener la necesidad de recurrir a todo tipo de falacias para justificar irresponsabilidades que son a la larga, responsabilidad de cada uno.
    LOS QUIERO CURSO :)
    SALUDOS PROFE MORI


    Probablemente su mejor alumna, Macarena Palacios.





    La obra Pedro Páramo, considerada por muchos como la obra narrativa mexicana por excelencia, fue escrita por Juan Rulfo y publicada en 1955. Esta novela pertenece al género narrativo, ya que relata acontecimientos de personas en un tiempo y espacio determinados, escritos en prosa.

    Históricamente, Juan Rulfo sitúa la obra en el México de la revolución, siendo su temática la identidad nacional y universal.
    El argumento de la novela esta centrado en la búsqueda, que cambia de objetivo mientras transcurre el relato. Algunos objetivos presentes son las búsquedas realizadas por el protagonista: de su origen, del amor, de la identidad, de la tierra prometida, etc.
    El protagonista de la obra es Juan Preciado, un hombre condenado al fracaso, quien viaja a un pueblo llamado Comala a realizar el ultimo deseo de su difunta madre: encontrar a su padre, Pedro Páramo y cobrarle lo que era suyo. Juan preciado es presentado como un antihéroe, hombre que posee características humanas, y padece por ellas. Juan Preciado es un personaje característico de la contemporaneidad.
    El autor, es también considerado de la época, es decir, es un novelista contemporáneo. Esto se debe a que existen en la estructura narrativa de su obra, elementos que evidencian la contemporaneidad y la riqueza técnica, tales como: las anacronías, el entrecruzamiento de historias y recursos literarios como el fluir de la conciencia, el monologo interior, racconto, flash back, etc.
    Sin embargo, uno de los elementos que le da mas veracidad a la novela, es el perspectivismo múltiple o también llamado polifonía; es decir, los tipos de acercamiento que nos muestran como los personajes viven un mismo hecho y lo narran según su perspectiva.
    Esto nos enseña la complejidad de la obra. Un claro ejemplo son las descripciones que se hacen de Comala. El pueblo es descrito de tres formas por distintos personajes: Comala infernal; nos es presentada por Juan Preciado durante su llegada y estadía en el pueblo, Comala paradisíaca; es descrita como un paraíso por la madre de Juan, Dolores Preciado, y finalmente Comala de Pedro Páramo, que es descrita al narrar la historia de Pedro Páramo, demostrando el poder omnímodo que posee sobre el pueblo.
    Los tipos de acercamiento presentados en la obra, pueden ser clasificados en 2 voces: un narrador principal omnisciente y un narrador protagonista que surge del primero.
    La narración relatada en primera persona, ocupa la voz de Juan Preciado, para relatar los sucesos anteriores, durante y posteriores de su viaje a Comala. Narra con focalización interna. Un claro ejemplo de esto es el principio de la obra: “Vine a Comala porque me dijeron que acá vivía mi padre, un tal Pedro Páramo” Juan preciado relata la historia canalizándola, ya que esta, es narrada en forma de dialogo por múltiples personajes a quienes el narrador omnisciente les presta su voz, por lo que este, realiza lo que podríamos llamar un orden de ideas.
    La segunda narración podríamos decir que es la principal, ya que contiene el relato del narrador protagonista antes mencionado, dentro de sus narraciones en forma de dialogo. Sin embargo no nos damos cuenta de esto hasta que Juan Preciado muere y comparte su tumba con Dorotea. Es ahí cuando el lector puede percatarse que las narraciones de Juan Preciado no son más que uno de los muchos relatos realizados por los personajes para contar la historia de Pedro Páramo a través de la suya.
    La segunda voz, es un narrador omnisciente, por lo tanto, de focalización cero. Como ya mencionamos anteriormente, presta su voz a distintos personajes, tales como: Fulgor Sedano, Dorotea, Eduviges Dyada, Damiana Cisneros, el Padre Rentería, Abundio, Gerardo e incluso Pedro Páramo. Quienes relatan sus historias ya sea con respecto a Comala o con respecto a lo acontecido en Comala por efecto del poder ejercido por Pedro Páramo.
    Para ejemplificar, utilizaremos dos personajes: Pedro Páramo, relata parte de su infancia mediante la omnisciencia del primer narrador, sin embargo lo hace en primera persona. Estos relatos son breves y hacen referencia principalmente a su gran amor y único amor. “Pensaba en ti, Susana. En las lomas verdes. Cuando volábamos papalotes en la época del aire.”
    Por el contrario, el segundo personaje Fulgor Sedano, quien es el administrador de Pedro Páramo, relata como poco a poco se adueña del pueblo y elimina sus deudas asesinando a sus deudores o simplemente casándose y seduciendo a las hijas de éstos. Fulgor, al principio, se cuestiona porqué Pedro Páramo le trata como si fuese superior, sin embargo posteriormente cede en forma inconciente, tratándolo de patrón y reconociéndolo como su amo. Las dudas del principio, se ven fundamentadas en los recuerdos del padre de Pedro Páramo, Lucas, quien advertía a Fulgor que se marchara al morir.
    “Yo no esperaba nada de él. ‘Es un inútil’ - decía mi difunto patrón. “Un flojo de marca”. Yo le daba la razón. “Cuando yo muera váyase buscando otro trabajo, Fulgor.””…No se cuente con él para nada, ni para que me sirva de bordón servirá cuando yo esté viejo.”
    A pesar de las advertencias, Fulgor se convierte en el brazo ejecutor de su patrón, destruyendo poco a poco a Comala.
    Para concluir, podemos volver a mencionar que son los variados tipos de acercamiento, los que le dan la complejidad y grandeza a la obra, dándole también las características para ser considerada como una obra perteneciente al mundo del realismo mágico. Posiblemente la obra mexicana realista-mágica mas importante de todos los tiempos.

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